lunes, abril 17, 2006

Quemados

En el pueblo cuando te dicen que estás quemado significa que ya fuiste, que no existís, que nadie te da pelota. En la ciudad en cambio, significa que tenés las neuronas quemadas por el uso de sustancias tóxicas. Pero hay una tercera acepción popular del término y es la de llamar así al que demuestra un delirio superior al normal, el que está un cambio arriba.
No se porque se me ocurre pensar en Roberto Pettinato, Petti. Me acuerdo cuando volvió a la Argentina desde España hace que se yo cuantos años. Yo lo registraba por esas barbas estrambóticas de la época de Sumo (me gustaba Sumo pero hasta ahí, siempre fui de Soda) y también por el pitito de la tapa del disco de Pachuco Cadáver. Nunca se aclaró ese enigma: ¿ era un fotomontaje o era real?
Petti cayó en un programa de ATC que se llamaba " Rebelde sin Pausa ", lo conducía un tal Alfred que siempre estaba en todos lados para esa época y Vicentico! El programa siempre fue un bardo, Vicentico no hablaba nada, estaba todo el programa acostado en un sillón y se rascaba la panza. Un día le pegaron un voleo y apareció Petti. Cambió la apertura y le puso unas imágenes ágiles con el tema " Rebel " de Bowie de fondo y empezó con esos chistes que todavía recuerdo. Así comenzó su larga y ascendente carrera en la televisión.
Hoy por hoy no tengo tele, no vi la nueva temporada de "Duro de Domar" pero sinceramente muchos de nosotros hacemos lo que hacemos gracias a él,porque no podemos creer el vuelo que el tipo le pone a los programas y lo sentimos un precursor de los códigos de nuestra generación. Así como me acerqué a la publicidad por Cerati y al cine por Jim Morrison, podría decir que me acerqué al periodismo por Petti.
Y solo a un quemado como el se le puede ocurrir dedicar todo un número de su revista a Spinetta, el rey de los quemados. El bombero quemador de cerebros.
Hace mucho que no compro sus discos, pero siempre aparece alguno por ahí. Hace poco viajé con mi primita de radiantes 21 y entre sus discos electrónicos y de Miranda! aparecieron varios del Flaco ¿Y esto?, la inquirí maravillado.- Me los prestó un amigo, están buenísimos- respondió tranquilamente. Incluso había discos piratas en vivo que no conocía. Es que el flaco, aunque no figure en los mas vendidos siempre circula en el boca a boca que los mayores les van transmitiendo a los menores como un secreto, como una revelación.
Lo vi en el verano cuando estuvo en el Rosedal, la magia sigue intacta. No importa de que época sean los temas que suenan, esa guitarra y esa voz tienen una conexión con el más allá. Es como un chamán, un médium y está más allá del género rock y de las comparaciones. El tipo conecta con el infinito y se lo ve feliz de ser una antena que nos baja la belleza a tierra. Todo el tiempo agradece y arenga por la paz y el amor, no como un hippie grasa, sino como el tipo que está en carne viva porque acaba de ser atravesado por la electricidad, por el éter.
El misterio de sus letras no es lo que dice, sino como lo dice, la letra no se puede analizar fuera de la música y viceversa. El misterio es la belleza.

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