sábado, noviembre 26, 2022

HIPERTENSIÓN

 Hace un tiempo que tengo presión. Alta la baja.

Cuando consulto porque puede ser es bien simple: nervios, ansiedad, depresión.

Nada nuevo.

Es el ego, la mente, llamalo como quieras.

Es algo falso que dominó siempre mi vida y se resiste a morir.

Pero la batalla está ganada de arranque.

¿Cómo me podría derrotar algo que ni siquiera es real?

Hay algo en mí que boicotea todas las meditaciones, toda la paz, el silencio.

Tal vez algo denso y oscuro de la infancia.

Como fuera, el buscador es lo buscado.

Y estoy para esto: encontrarme y despertar feliz.

martes, noviembre 22, 2022

CONSCIENCIA CÓSMICA INFINITA Y ETERNA


Eso que algunos llaman Dios pero lo han usado para cada cosa que mejor no llamarlo más Dios.

Esa consciencia cósmica es lo único que existe en todo el Universo.

Lo entreveo en la mal llamada meditación.

En el estado de no mente, cuando expiro e inspiro.

Ahí se frena la mente y aparece el auténtico ser.

Nosotros no somos, solo es la Creación, la Divinidad, la Totalidad.

Un mar infinito y eterno del cual somos solo una gotita perdida, que sin embargo, cuando encuentra su camino, vuelve a ser el mar.

Tenemos mil y una resistencias a volver al Ser.

Pero ese es nuestro destino.

Y con el ejercicio diario se va ampliando ese gap, esa brecha de luz, de presencia, de conciencia.

Porque la mal llamada meditación, la no mente, no tiene que ver con posturas físicas raras.

Es simplemente un estado de acá y ahora que se puede dar sentado, parado, caminando, corriendo, nadando o lo que fuera.

Ese es el Paraíso en el que vivían Adán y Eva y que perdieron por adquirir una mente, un ego, una capacidad de juzgar el bien y el mal.

Entonces volver a cero, a la tabula rasa que éramos cuando nacimos: sin pensamientos, sin juzgar.

Pura conciencia luminosa: presencia, observando, siendo testigo.

Siendo uno con el Ser.



martes, noviembre 15, 2022

MADRE NATURA


 

El domingo, en un breve retiro espiritual, reconecté con la naturaleza.

La caminamos, la respiramos, meditamos a orillas de un arroyo, en medio de un bosque.

Recordé lo que dice Osho y recuperé sensaciones guardadas desde mi infancia.

La madre natura es esa madre amorosa que nos perdona todas las cosas horribles que le hacemos.

Debemos volver a ella.

De hecho, me parece mucho más razonable creer en la Pachamama que en un dios abstracto. Esta es una divinidad que podés ver, tocar, respirar.

Hoy por hoy me parece una boludez ir a amontonarme en ciudades enormes, alienadas, contaminadas, a no ser que sea por importantes obligaciones laborales.

Debemos volver a casa, a la naturaleza.

Salvarla, salvarnos.

sábado, noviembre 12, 2022

ESQUIZOFRENIA




Durante muchos años no acepté mis problemas. Los negaba, hasta escribí un libro como una especie de denuncia.

Cuando te hablan de esquizofrenia generalmente dicen de gente que escucha voces en su cabeza y eso nunca me pasó, entonces no aceptaba.

En verdad, la débil ciencia humana, ya sea psiquiatría, psicología o psicoanálisis, agrupa un montón de trastornos que no comprende bajo el nombre de esquizofrenia o psicosis.

En lugar de decirte: estás re loco, chabón, no te entiendo, te dicen sos esquizofrénico. 

Eso: el estigma, lo misterioso, lo que nadie comprende.

En mi caso, el trastorno se activa especialmente en mis relaciones con mujeres.

Hay algo en mí que se enloquece por ellas y con ellas.

No soy peligroso ni violento, más bien todo lo contrario: algo se tilda en mi y me vuelve inoperante.

Toda mi vida y cada vez más, se producen esos encuentros y desencuentros locos con mujeres que antes me aterraban y ahora casi que me dan risa.

Ellas no me entienden y yo no me entiendo.

Supongo que hay una lección importante en todo esto, la Creación no hace nada porque si.

Y si la hay, la voy a encontrar.

Mientras tanto, resuenan en mi cabeza los terribles versos de Dárgelos: " la vida es un vaso de gaseosa aguada/como una secuencia de bromas pesadas".

sábado, noviembre 05, 2022

LA FIESTA DE LA DIVERSIDAD



Justo en el día de la marcha del orgullo, me devoré "El fin del amor" la serie protagonizada por Lali Espósito, basada en el best seller de Tamara Tenembaum. La serie es un festejo hermoso de la diversidad sexual y de pensamiento. De la libertad.

Hará unos 12 años la conocí a Lali y le pronostiqué algo así: digo la consagración absoluta no solo en popularidad sino también en calidad, no solo en la música, también en la actuación.

Este es un papel a su medida y lo mejor que ha hecho en su vida, claramente.

Es muy inteligente el guión de Tenembaum porque es la primera en criticar su propia figura y jugando fuerte, a fondo, se corre siempre antes de caer en la autoindulgencia.

Hay también un casting hermoso que parece una fiesta de amigos, donde todos tienen su momento para lucirse.

Aparte de Lali, me gustó mucho la actuación de Vera Spinetta, Verónica Llinás y un "malo" de antología: Mike Amigorena.

Mucho sexo, drogas y rocanrol adonde resaltan las escenas hot de Lali con Mariana Genesio Peña y la de Julieta Ortega con Vera Spinetta.

De los 10 episodios no todos tienen el mismo nivel de intensidad pero son muy parejos en cuanto al nivel artístico.

Otro hallazgo maravilloso de Amazon Prime Video, junto con "Argentina, 1985".
 

miércoles, noviembre 02, 2022

¿CUAL ES LA VERDADERA BATALLA QUE HAY QUE DAR?

 Que el árbol no nos tape el bosque.

Que lo urgente no nos haga olvidar lo importante.

Lo urgente, lo de todos los días, es la rosca política.

Luchar por defender la causa progresista, con este gobierno mediocre y falto de autoridad que pese a eso está muy por encima del gobierno de Macri, cumbre absoluta de la ineptitud e hijoputez.

Pero hay gente muy involucrada con la lucha ambiental y al principio me parecían chetos excéntricos pero cada vez me convencen más de estar en lo cierto. Liz Solari, por ejemplo: te plantea que vamos derecho al colapso ambiental, a la muerte del planeta Tierra y que la única solución es dejar de contaminar y dejar de comer carne.

Nada menos, en el país del asado y las vaquitas ajenas.

Ya en la cultura de los meditadores está implicita la cultura vegetariana. Ahora esta nueva generación es aún más extremista, hablan del veganismo como única solución.

Y es que no solo está mal comer seres vivos por una cuestión religiosa, hoy día toda la industria que genera la carne animal contamina, poluciona todo y nos lleva rápido al abismo.

Entonces, dicen Liz y otros, hoy tenemos que ser veganos para salvar al planeta y a nosotros mismos.

Terrible, al principio me parecía una exageración pero cada vez me parece que el escenario apocalíptico está mas cerca.

¿Qué es más importante: que todos tengan para comer o salvar al planeta y a la raza humana?

Es horrible plantearlo así pero cada vez tenemos menos margen de maniobra.

El tiempo se acaba y el 2023 me verá tomando algunas decisiones drásticas.

El que avisa no es traidor.