jueves, marzo 31, 2022

1989

 




El algoritmo de You Tube me tiró por la cabeza el maxi simple "Languis" de Soda.

Es de 1989 y hacía una vida que no lo escuchaba. Y oh sorpresa! Me volvió a encantar.

Los puristas lo suelen considerar un paso en falso, una obra menor.

No lo creo, es un híbrido, un punto intermedio fascinante como luego lo sería "Rex Mix" (1991).

Arranca a toda marcha con "Mundo de Quimeras" una guajira obviamente inspirada en "Guantanamera" pero que está muy bien y si me apurás, te digo que la copia supera al original.

Y luego empiezan las sorpresas: reversión de Los Languis, un temita masomeno de "Doble Vida".

La reversión es hermosa y coquetea tanto con el jazz como con el tango y tecno pop. Y te deja esa sensación que me embargó siempre escuchándolo a Cerati: que podía ser el mejor del rock, del pop, del tecno, de la salsa o de lo que fuera. Derramaba talento en cualquier boludez que hiciera. Es un héroe colosal, mítico.

Luego vienen dos remixes hechos por los Soda mismos, así a los ponchazos, intuitivamente, sin DJs de por medio. Y sin embargo, siguen estando muy bien. Tanto "En el borde" como "La cúpula".

En esos momentos el país se iba a la mierda, se iba Alfonsín y llegaba Menem y los Soda venían de un disco muy exitoso pero demasiado frío, sobreproducido (Doble Vida). 

Hay un momento de confusión en el que incluso se pensó que el próximo larga duración sería todo de ritmos latinos, pero luego Gustavo frotó la lámpara y ya sabemos lo que pasó.

lunes, marzo 21, 2022

OTOÑO

Llegó el tiempo de meterse para dentro.

De dejar la cerveza y tomar el vino.

Ya viene el bello abril y la Semana Santa.

Guardarse y esperar señales.

Dios proveerá.

El Tao dirá por donde continuar. 

miércoles, marzo 16, 2022

EL VACÍO


 


Concepto controversial si los hay, el más importante y el más controversial, el vacío se le aparece a Buda y después también a Osho.

Dice Osho que el ultimo paso es cuando llegamos al vacío, que es como un espejo, todo lo refleja y todo está vacío, en potencia.

De ahí surge la acusación occidental de que todos estos meditadores son ateos.

La respuesta es paradojal: si y no.

No se cree en esa idea infantil de un gordo de barba blanca arriba de una nube. Pero algo hay, pasa que a los occidentales el vacío nos angustia, nos parece la nada misma.

Otra vez Osho aclara:  es como si a alguien que estuvo siempre enfermo se le quiere explicar la salud: entonces se le dice: no hay nada, ninguna enfermedad.

Osho también explica una y otra vez que muchos santos y supuestos iluminados no han llegado hasta el final del viaje: el cristiano ve a Cristo y el budista ve a Buda. Y se detienen ahí, dicen: llegué. Pero ese es el último truco de la mente. El viaje meditativo debe seguir hasta que no haya nada. El vacío.

El Zen lo dice bien: el vacío es la forma y la forma es el vacío.

Como diría una vieja: no somos nada.



viernes, marzo 11, 2022

SUEÑOS

Algo profundo e inasible se juega en el mundo de los sueños.

Somos inconscientes, solo algunas veces nos damos cuenta de que estamos soñando y aún así la ilusión persiste.

Dicen que la vigilia es solo un sueño más sofisticado.

Aparecen todas ellas, mis amadas, en mis sueños pero las derivas que estos toman se me escapan como agua entre los dedos.

Antes soñaba con más intensidad: colores, sonidos.

Ahora el inconsciente parece volverme todo una película en blanco y negro.

Mi inconsciente es muy irónico y suele jugarme bromas pesadas.

Jorodowsky dice que los sueños pueden ser totalmente conscientes y que los podés dominar a voluntad.

Igual no le veo mucho la gracia.

Me interesa mucho más desentrañar este sueño del mundo real.

viernes, marzo 04, 2022

NUESTRO ARTISTA RENACENTISTA


 


Es zarpado el nuevo disco de Fito Páez "Futurología Arlt" que forma parte de una trilogía sobre sus años salvajes.

Inspirado por "Los siete locos" de Roberto Arlt, el rosarino musicaliza clásica y tangueramente la obra maestra de la literatura argentina.

Y confirma lo que siempre sospechamos: que Fito es nuestro renacentista que no le tiene miedo a nada ni a la música, ni a la literatura, ni al cine.

A todo se anima y en todo se destaca en mayor o menor medida.

También hay tropezones, obviamente, no todo le puede salir brillante, pero el balance, como en este disco, es muy positivo.

Aparte del bon vivant que se coge a todas las minitas, a Páez le sobra resto para escribir, componer, filmar y conquistar el mundo sin dejar de ser bien argentino.

Sinceramente me sorprende y no deja de sorprenderme nunca la cosmovisión exquisita del Rodolfo.