LA VERDAD DETRÁS DEL CHISTE

 

Llego un poquito tarde pero nunca es tarde cuando la dicha es buena.

Netflix me sorprendió produciendo esta excelente serie argentina: "División Palermo".

Aquí se revela como un nuevo genio de la comedia Santiago Korovsky quien protagoniza, escribió y dirigió esta serie junto a un equipo de guionistas y a un elenco de lujo.

La excusa graciosa y tremendamente actual es la creación de una guardia urbana inclusiva, pero detrás del chiste, de la comedia y del humor negro, hay un paneo super realista sobre como son las fuerzas de seguridad y la sociedad en si misma.

No por comedia es una pavada, la temática es actual y asperísima. Y está tremendamente bien escrita, dirigida y actuada.

Y cuando es así, como en este caso, todos se lucen por igual.

Son 8 episodios de 30 minutos que provocan adicción, como las drogas que aparecen en la serie.

Me los devoré de corrido.

Bien acá Netflix que ahora anuncia una segunda temporada de la serie y que encima está produciendo la adaptación de "El Eternauta".

PASIONES Y OBLIGACIONES

 Escribir para mi es una pasión, es orgásmico, lo disfruto y no puedo parar de escribir.

No puedo vivir sin escribir. Es como respirar. Eso es pasión.

Con la radio es distinto, lo disfruto al principio pero después de, digamos, seis meses, me estalla la cabeza y no quiero saber nada más.

En algún punto se vuelve una obligación, una rutina y me abruma. Eso fue lo que me pasó siempre y me pasó también en mi última experiencia con "Música para camaleones". Me pongo nervioso y uso cualquier mínima excusa para irme. Entonces eso no es pasión, es obligación.

Me acuerdo en 1992 cuando escuchaba a Bobby Flores en la Rock and Pop el decía algo así: que el apasionado de la radio puede estar todos los días, llueva o truene, se sienta mal o bien. Sigue y sigue. En cambio el que lo ve como hobby se termina cansando.

Lo que disfruto entonces, lo que es mi pasión, mi identidad, es la escritura.

Soy escritor.

UNA PESADILLA EXTRAORDINARIA

 

En estos tiempos de película de Barbie y otras pelotudeces, Mubi me sigue tirando magia.

Volví a ver "Brazil" obra maestra de 1985 que se ve con una mezcla de placer y angustia.

El gran Terry Gilliam tomó toda su genialidad ya entrenada en los "Monthy Pithon" y la puso en esta película con esa mezcla asombrosa de delirio pesadillesco y ácida ironía.

Distopía amarga, oscura. Dark, trash, ciencia ficción retro futurista, kitsch kafkiano etc, etc...

Acá todo es hermoso, hasta lo más flojo de un argumento inquietante que ni siquiera necesita ser tan creíble para impactar.

Está película marcó un antes y un después en su diseño de producción, efectos especiales, manera de encuadrar, montaje. Influyó y sigue influyendo en el cine y la publicidad y en el diseño todo.

Las influencias van y vienen se me ocurre ahora pensar que tomó algo de "Blade Runner" (1982) sobre todo en ese final alucinado pero también influyó claramente en la película francesa "Delicatessen" y en el final de "Total recall" (la primera).

Hay algo de "1984" de Orwell en la historia de ese oficinista atrapado en un mundo de mierda que escapa a través de sus sueños, y también claro, hay algo del Kafka de "El proceso" y quien sabe de cuantos más.

Pero sobretodo está el genio enrevesado de Gilliam, que nunca antes y después volvió a volar tan alto como en este film.

LA PROPAGANDA DEL IMPERIO

 

Llámenme hippie, pero me llama poderosamente la atención, leyendo a críticos de cine que respeto y que saben mucho más que yo, la poca línea ideológica que hay al aceptar los denominados tanques de Hollywood.

Como pasa en este momento con la última de Misión Imposible o la biopic de Oppenheimer.

La verdad que no me interesa nada de la vida de alguien que creó la bomba atómica, para mi es un asesino, un ser despreciable, que me vas a venir ahora con que era progre o simpatizaba con el marxismo.

Lo mismo con el personaje de Tom Cruise, un agente de la CIA que es buenísimo e incorruptible, una boludez todo, la CIA es un organismo siniestro ¿Qué me querés vender?

Así no hay filtro para nada, todo da lo mismo y absorbemos toda la propaganda del imperio yanqui en películas super elaboradas pero claramente tendenciosas, que nos quieren hacer pasar gato por liebre.

Y lo logran.

Otra: la saga de Star Wars o las miles de películas de guerra, con su mensaje burdo de que luchan el bien contra el mal y que el bien son justamente ellos: los yanquis.

Así el cine se convierte, en lugar de una fábrica de sueños, en un excelente método político propagandístico.

Es marketing disfrazado de arte.

BOBBY FISHER VE LA COMBINACIÓN IMPOSIBLE

Hay una partida de Bobby Fisher de 1956, cuando tenía solo 13 años, que se conoce como "La partida del Siglo". Allí juega con negras contra el maestro internacional Donald Byrne que lo boludea un poco haciendo jugadas dudosas y provoca que el niño le pinte la cara con entrega de dama incluida.

Pues bien: en estos días descubrí otra partida mejor. Siete años después, Bobby se enfrenta contra el hermano de Donald, el gran maestro Robert Byrne, otra vez con negras, y ejecuta una sinfonía táctica inentendible para nosotros los mediocres aficionados. Acá el otro Byrne se cuida bastante, hace jugadas más o menos lógicas pero igual se come una combinación sublime.

¿La mejor partida de todos los tiempos?

Bobby es como el Diego. Tal vez Kasparov sea más completo, tal vez Messi hizo más goles, pero hay una dimensión mítica de semi dioses que solo Bobby y el Diego comparten.

Los dos salieron de la nada y conquistaron un mundo hostil.

Y los dos se terminaron yendo al carajo, cada cual a su manera.

Se ha dicho mucho sobre la mente brillante y psicótica de Robert James Fisher que lo hacía donar su dinero a una fundación antisemita cuando el era judío. También cuando enfrentó a toda la Escuela Rusa y los vapuleó. "No entiendo las jugadas que hace " dijo Taimanov, aterrado.

Desapareció por décadas y luego volvió en Yugoslavia rompiendo el bloqueo yanqui y escupió una bandera de su propio país. Pidieron su captura internacional y pudo zafar volviendo a la Islandia que lo recordaba de su hora más gloriosa.

Murió triste y solitario, como un mendigo.

EL PELIGRO DE CASARSE

 Mubi me recordó una película de 2014 que se me había escapado del radar: Perdida (Gone girl).

Basada en un best seller y dirigida por el siempre notable David Fincher, la película pone el dedo en la llaga de la corrección política y el feminismo tan en boga.

Acá la loca mala es la esposa (grandes interpretaciones tanto de Rosamund Pike como de Ben Affleck) en un matrimonio que comienza como una bella historia de amor hollywodense y después se comienza a deformar.

Tal vez esa deformidad es excesiva y eso le quita verosimilitud a la historia. No hay psicópatas como Amy en la vida real (¿o si?) pero lo brillante de la película es como pone a funcionar la maquinaria social de la corrección política y la porquería de influencia que ejercen los medios de comunicación acá, allá y en todas partes.

Es una tragicomedia de humor negro. Muy negro.

Y termina mal (¿o bien?).

Y nos deja felices a los que nunca nos casamos.

LEYENDO EL TAO TEH KING

Se calcula que Lao Tsé vivió unos 500 años antes de Cristo.

Es chino y el fundador del Taoísmo.

Hay varias leyendas sobre el: una que nació riendo, otra que nació viejo, etc.

También cuenta la leyenda, que yéndose de China hacia Occidente fue detenido por un guardia y obligado a escribir un libro donde dejara constancia de su sabiduría para todos los chinos y especialmente para el Rey.

Así escribió entonces el "Tao Teh King".

Son solo 10.000 caracteres de una prosa poética, paradojal, fascinante.

En este pequeño libro se guarda la sabiduría de todo el Universo.

Algunas cosas se entienden claramente, otras son crípticas.

Muchos hablan de el como si fuera un filósofo. Según Osho, esto es un error y en el libro se aclara eso de que "el sabio no es erudito, el erudito no es sabio". Así que de filósofo y teólogo nada.

Un iluminado simplemente. Un hombre común.

Nada personal con los filósofos pero Osho y Lao Tsé dicen que no saben. Todo bien por ejemplo con Tomás Abraham, que a pesar de ello habla maravillas de Osho.

Pero estaba con Lao Tsé: un hombre común, simple, un sabio, un iluminado que escribió este librito maravilloso que recomiendo leer.
 

MASTER PIECE

 

En 1995 Johnny Depp todavía era joven y bello, aparte de un actorazo.

Entonces el inmenso Jim Jarmush le escribió y filmó este regalo: Dead man.

Western psicodélico, dijo alguien por ahí.

El western absoluto digo yo, su punto más alto y a la vez su cancelación.

El oeste salvaje, sucio y asesino, adonde llega un contador cándido y temeroso interpretado por Depp.

Allí pasaran cosas casuales y horribles que lo empujarán a la aventura.

O la negación misma de la aventura, del western, del heroísmo.

El antihéroe está muerto desde que llegó a ese lugar salvaje y despiadado y un aborigen desclasado lo acompañará en ese recorrido ritual que tiene algo de mágico, aparte de tragicómico.

Con un blanco y negro precioso y la guitarra del colosal Neil Young, no hace falta nada más: esto es arte, arte, arte.

ALGUNAS IDEAS SOBRE DAVID LYNCH

Mubi subió "Carretera perdida" (1997). La había visto en el momento de su estreno en el cine y la volví a ver recién en la compu.

Como toda película de David Lynch es polémica y fascinante.

Hay un casting con muchas caras conocidas y un protagónico colosal de Patricia Arquette, una femme fatale que son dos (¿o la misma?).

En principio está el tema de los celos, la paranoia de un matrimonio oscuro que deriva en una especie de película de terror. Pero eso se acaba rápido y comienza una película noir con mafiosos perversos. Y en algún lugar las dos mitades se unen. Aunque no todo cierra como es habitual en Lynch, a quién parece importarle poco el verosímil en sus obras, pero si conmover con imágenes potentes y sonidos misteriosos.

En ese sentido la película atrapa y pone en juego la idea de que una persona pueda convertirse en otra y que ambas tienen vidas paralelas. Y aman a la misma mujer (?).

David Lynch: ¿genio o vende humo?

Que es un personaje inolvidable, sin duda, por algo Spielberg lo eligió para que interprete a John Ford en su película más personal. Pero a veces tengo la sensación que se le ven mucho los hilos a sus misterios existenciales y desearía un poco más de rigor.

En algún lugar comentó que la práctica de la meditación trascendental le ayuda a tener ideas para sus films y series. Insólito que alguien medite y se le aparezcan tantas oscuridades en lugar de luz. Incluso escribió un libro explicando su método.

Como riéndose de todo y todos hizo una película que se llamó "Una historia simple" que no tiene nada que ver con el resto de su filmografía pero el film que me sigue pareciendo el más potente y redondo sigue siendo "Terciopelo azul".

CUIDADO CON LO QUE DESEAS

Una secuencia de noticias que pasó bastante desapercibida en el fárrago de boludeces que los medios publican fue la referida a Paul Auster y su familia.

El gran autor de "La trilogía de Nueva York" y otros librazos tenía un hijo y un nieto bebé. El hijo adicto a la heroína. Un día el hijo de Paul estaba durmiendo con su hijito y al despertar el niño estaba muerto. Cuando le hacen la autopsia descubren que había muerto de sobredosis de heroína. ¿Su propio padre se la inyectó? Por Dios. Al poco tiempo este aparece muerto también de sobredosis de heroína. Horrendo, espantoso. Para colmo de males parece que este hijo no se llevaba con su padre Paul y lo acusaba de tener toda la culpa de sus desgracias.

Conclusión: Paul Auster está enfermo de cáncer.

Una secuencia demencial que parece extraída de una ficción austeriana.

Esos hechos casuales que se terminan revelando no tan casuales.

Como si Paul Auster estuviera viviendo una pesadilla que el mismo imaginó.

¿Qué pasa con los artistas, crean su destino, lo escriben y lo viven? Pienso en Cerati, pienso en Kerouac y esos finales aterradores.

Hay que tener mucho cuidado con lo que se desea e inventa.

Puede que se cumpla.