Ahora casi todos tienen su camarita digital, las chicas y los chicos posan cual modelos top y se sacan 500 fotos por día. Recuerdo a fines de los ochenta, principios de los noventa, el poder totémico que tenía la publicidad. Los que estaban en la foto o en la tele eran inalcanzables. Por eso fui como un boludo, creo, a estudiar Publicidad, entre otras razones más casuales. Pero hoy todos son modelos, por lo tanto, cae la cotización de las top. Hoy todas son top, la sabia profecía de Warhol se cumplió: hoy todos tenemos nuestros 15 minutos (o segundos) de fama.
Otro tanto pasa con el poder que tenían las peliculas porno, eran objetos preciados, deseados. Hoy ya casi no existen. Entre los sitios gratuitos tipo You Porn y las filmaciones caseras de las parejas, las porno han perdido su poder mágico.
¿Pero, adonde vamos a ir a parar?
A un lugar mejor, sin duda, creo que la diferencia estriba en quienes sepan aprovechar la tecnología como una puerta a la libertad y los que queden idiotizados, alienados a la máquina.
Casa
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La casa de la infancia
viene con el olor de los jazmines
la sombra de la parra en el patio
y el silencio caliente de las tardes de verano
La casa de l...
Hace 11 horas.
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