Todos tenemos una familia y ninguna es perfecta. Pero hay algunas más imperfectas que otras.
Y de las ideas de perfección, la que se me antoja como más perfecta, aún sin conocerlos demasiado, son los Ortega.
Lo pensaba la otra noche mientras veía a Palito con Jay Mammón.
El Rey Palito, la dulce Evangelina, el hedonismo sexy de Julieta, la ternura de Rosario, el genio desaforado de Luis, etc, etc.
Todos son talentosos y luminosos ¿Qué puede salir mal?
Hay en cambio otras familias (famosas y no famosas) que están marcadas por un destino oscuro, trágico.
Hay gente que brilla a plena luz de sol y otros que se esconden en el under, en el dark, como vampiros.
Yo mismo siempre tuve en mí ambas tendencias, pero hoy por hoy ni lo pienso: elijo la inspiración y la compañía de la gente brillante.
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