VIVO

Estuve leyendo el libro "Cerati en primera persona" y las sensaciones son paradójicas: por un lado, es un placer leer la palabra en crudo del más grande, sus pensamientos más íntimos y desconocidos. Por otro lado, me parece que no está a su altura, se necesita de un escritor talentoso que le haga honor y encuadre sus ideas e hitos de su carrera. Para colmo, el libro no abarca toda su discografía, solo es de 1992 en adelante.
En fin, pero no es esto de lo que quiero hablar.
Cuando Gus comenta su disco solista más flojo "Siempre es hoy", afirma que el tema "Vivo" es uno de los mejores de su carrera y que le salió de un tirón.
No recordaba ese tema como algo interesante, pero lo volví a escuchar. Es bastante cursi.
La idea, ya presente en el genial y zen título de "Siempre es hoy" es transmitir la sublime emoción que nos embarga a todos cuando de pronto tomamos conciencia de lo que es estar vivo, del milagro de la creación y de la fugacidad del tiempo.
Que tema, por Dios. Para mí que es el más importante y el más difícil de todos. Aún más que el del amor.
Acá patinan hasta los más grandes, como Cerati o Borges.
El viejo y nunca bien ponderado tema de la tautologia.
Es mucho más emocionante leer lo que declaran los grandes artistas sobre la vida, que disfrutar de una canción o un cuento que intenta ilustrar ese sentir.
Como que le queda grande al arte ese tema espiritual, filosófico, fundamental, misterioso, inasible.
Y si patinan ellos, como no voy patinar yo: este blog se llama MiraventZen porque siempre me fascinó ese chispazo de conciencia elevada que representa el zen. Pero obviamente uno se queda en palabras lindas y nunca logra aprehender el temita este de la existencia humana.
Es una experiencia común a todos: el satori, la epifanía, el despertar. Un día sin previo aviso iluminarse y decir: que loco, estoy vivo,¿que significa todo esto?¿que es la vida?¿que es la muerte?
Entonces, los músicos escriben canciones, los escritores escriben libros y los bloggers hacemos un post que no puede más que reflejar una torpe emoción inexplicable.