La prohibición por decreto de los avisos del rubro 59, no va a acabar con la prostitución ni con la trata de blancas, pero es un paso inteligente y sensible para terminar con la discriminaciòn. Lo dice un putañero viejo.
Además, leer la noticia en el diario donde siempre consultábamos buscando alguna puta y como bien dijo Cris: "donde en las primeras páginas se critica al gobierno por no hacer nada contra la trata de personas y en las ultimas se leen los avisos de oferta sexual" es uno de esos placeres únicos que te da la vida.
Es un tema clave y que da para grandes debates: la prostitución nos ha dado muchas alegrías y desahogos desde el comienzo de la Humanidad, pero una cosa es pagarle a una mina que quiere y otra muy distinta es que la mina lo haga porque la obligan, porque no le queda otra. Y en todo caso, es muy fino el límite en países y ciudades con mucha pobreza, de cuando la mina comienza a prostituirse "porque quiere" o porque no le queda otra.
Habrà que afinar la puntería para coger más dignamente y si, también existen formas de prostitución más sutiles...
Si fuera así...
-
Si las gotas cayeran hacia arriba
hasta anegar el cielo
Si este otoño inesperado
no estuviera tan fuera de lugar
Si esta lluvia invertida
no lavara...
Hace 1 año.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario