lunes, agosto 11, 2014

A UN MILLON DE AÑOS LUZ DE CASA



Hoy cumple 55 años Gustavo Cerati y lleva 4 dormido, en coma o muerto, no entiendo bien.
Cerati siempre fue para mi el mayor idolo y referente, no solo de la música, sino del arte todo. Es y siempre fue EL ARTISTA TOTAL.
Desde la adolescencia siempre leía su palabra como sagrada y lo imitaba en todo: look, gustos musicales, palabras, etc.
También iba mucho a los lugares que sabía que el frecuentaba para encontrarmelo y charlar. Me pasó varias veces eso de encontrarlo y charlar como si el no fuera una superestrella y yo su fan.
Hay una de esas ocasiones que nunca olvidaré porque además es bastante agridulce y habla no solo de su grandeza sino también de mi locura.
Pasó a principios de 1998, nos encontramos en Ozono, un bar que era de Gaby Malerba, yo iba bastante y me acuerdo que esa noche el estaba con Flavio Etcheto y vimos un recital de Tintoreros. Después del recital lo abordé para decirle que el reciente cruce discográfico entre Plan V y Black Dog me había parecido una cagada (!). Es verdad, ese no es un experimento electrónico muy feliz, pero lo gracioso es que Cerati aceptó la crítica y coincidió conmigo. Confundido, aturdido por mi locura e insensatez continué la charla y me comentó que ya estaba pensando en el que sería Bocanada, su segundo disco solista. Y como si nada, antes de irse, me comentó que estaba armando un equipo de gente para trabajar con el. Que cualquier cosa me comunicara a través de Gaby.
Imposible olvidar ese gesto de grandeza del que siempre será mi mayor idolo. Yo lo criticaba y el me ofrecía laburo. Lo terrible, desquiciado, fue que nunca me contacté con Gaby ni con el. Estaba en otra, definitivamente y unos meses después tuve mi primer brote psicótico. Autoboicot mal, deseo de ser castigado por la vida.
Pasaron los años y lo volví a cruzar varias veces pero ya no habría otra oportunidad. Igual siempre me trató bien y me contó que su madre Lilian es originaria de Huanguelén y nació en el Hospital de Coronel Suárez.
Después pasó lo que pasó y a veces siento que los hijos de puta que pedían por su muerte en los recitales terminaron lográndolo. O tal vez no, simplemente tiene el destino trágico de los semidioses.
El mismo anticipó la párabola de Icaro en sus canciones y siempre que podía la mencionaba: la anécdota del que se inventó unas alas para llegar volando hasta el sol y cuando se acercó a el se le derritieron y cayó víctima de propia temeridad, desafiando a los dioses.
Sea como fuere y pase lo que pase,el siempre estuvo y siempre va a estar a un millón de años luz de casa.

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