sábado, octubre 25, 2008

TODO ES ZEN


Puedo especular con mil ideas y trabajos artísticos, periodísticos, culturales.
Puedo imaginarme unas cuantas mujeres y dejarme llevar por las ilusiones, ilaciones mentales que no conducen a nada concreto.
Porque lo concreto es que: tengo el departamente sucio y despelotado y mi vieja llega el lunes a la mañana de visita. Hace días que doy vueltas y me busco excusas para no hacer nada.
Siempre tuve esa habilidad estranbótica para atisbar el infinito y a la vez no poder atarme los cordones de las zapatillas.
Es mi karma.
Es tan simple de ver.
El zen empieza por casa.

3 comentarios:

cecisz dijo...

todo llega Pablo! ya veo que deslumbrarás a tu madre con departamento resplandeciente! si atisbas el horizonte...!

Carlos Ardohain dijo...

Hay en la tradición del budismo Zen una anécdota, atribuida a Basho. He estado explicando Zen toda mi vida, confesó una vez Basho, y, sin embargo, nunca he podido comprenderlo. Pero, dijo su interlocutor, ¿cómo puede usted explicar algo que no entiende? Oh, exclamó Basho, ¿también tengo que explicarle eso?

Pablo Miravent dijo...

Carlos: Genial!!
Cecilia:Al final lo terminó limpiando mi vieja...