En Julio cumplo cincuenta años.
Llego solterito y sin apuro y también sin hijos.
Nunca estuvo en mis prioridades casarme y menos tener hijos.
Si tengo sueños por cumplir, asignaturas pendientes.
Relacionadas con el arte y la comunicación.
Pero me veo bien encaminado.
También quisiera vivir una historia de amor y muchas de sexo, drogas y rocanrol.
Una cita con café y torta con Juli, un porro con la China, etc.
Manejo un nivel de autoboicot importante, a veces parece como si estuviera endemoniado.
Pero todo llega.
Ya no salgo por salir, no malgasto mi energía al pedo.
La reservo para hechos puntuales, para lo que deseo de verdad.
Y como decía el gran Berugo: los sueños sueños son, pero aquí se hacen realidad.
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