Con respecto al chusmerío barato que implica dejar comentarios anónimos en una página web local, primero no contesté porque una vez contesté con nombre y apellido y vino cualquiera y me basureó de mala manera, uno refuta una mentira y te tiran diez. No tiene sentido contestar.
Pero quisiera reflexionar sobre la naturaleza de las acusaciones:
Primero, me parece obvio que los que las escriben son los mismos que no firman en "Nuevo Día", pero como es tan trucha la aseveración, ni siquiera se atreven a publicarla en su pasquín.
Segundo, que los que dicen que recibo un sobre por debajo de la mesa buscan igualarme con denuncias que yo les he hecho a ellos pero firmándolas, con nombre y apellido, hoy mismo me comentaba alguien cercano a Bilbao que tiene cheques firmados a la orden de determinado periodista que tiene la mala costumbre de manguear a todo el mundo para costear sus vicios.
Tercero, que la conspiración absurda de que haya un arreglo entre LU36 y el oficialismo por publicidad a cambio de que me den: ¡UN PROGRAMA CULTURAL LOS SÁBADOS A LAS 9 DE LA MAÑANA! no resiste el menor análisis.
Cuarto, que en definitiva, me quitan mérito: me contrató la radio porque soy bueno en lo que hago, porque tengo talento. Y si, también soy muy egocéntrico.
Quinto, que a Guillermo Sol no le renovaron el contrato, porque, con muy buen tino, Dukart me comentó que no le interesaba darle ventaja a nadie en este año electoral, aunque el radical se haga el periodista objetivo, igual es un medio de propaganda política el programa que tiene, no nos hagamos los boludos.
En fin, todo esto me parece un insulto a la inteligencia, pero hay algunos que son tan boludos (y boludas) que hay que explicárselo.
Casa
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La casa de la infancia
viene con el olor de los jazmines
la sombra de la parra en el patio
y el silencio caliente de las tardes de verano
La casa de l...
Hace 1 día.
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