Por si no fuera poco con la herencia de mierda que recibió del macrismo, este gobierno tiene que hacer frente a una inédita pandemia mundial y la consiguiente crisis económica que ella genera en el mundo.
Estamos todos tensionados, descolocados, así que hay que ayudar y entender a nuestro Presidente que hace lo que quiere y lo que puede.
Hay tensiones que vienen de adentro del gobierno y hay otras que vienen de afuera.
Después de ese tiro en el pie que fue Vicentin, adonde borró con el codo lo que escribió con la mano, el gobierno metió varios goles: el arreglo con los acreedores, la vacuna de Oxford y el congelamiento de las tarifas de internet, celular y cable.
No hay que aflojarle a esta oposición desvergonzada que hizo todo mal en su gestión y ahora habla como si tuviera todas las recetas. Encima tienen una minoría activa de boludos que salen con la banderita a defender lo indefendible.
Cristina mientras tanto, guarda un silencio estratégico.
Y los troskos como siempre son anti todo: anticuarentena, antigobierno y oh, sorpresa, terminan aliados a la derecha. Como siempre.
A mi también me parece una porquería tener que estar en cuarentena.
Pero no queda otra.
Estamos al borde del abismo en varios sentidos pero enteros.
Haciendo lo que se debe hacer.
Con producción y conciencia social nos vamos a poner de pie otra vez.
Estoy seguro de que, a Dios gracias, este gobierno tiene con que.
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