En estos días volví a escuchar ese himno que es "Everybody knows" de Leonard Cohen, que dice todo lo que hay que decir, especialmente esas estrofas: Todos lo saben/la guerra terminó/todos lo saben/los tipos buenos perdieron.
Con este país embarcado en un viaje demencial hacia el abismo. Endeudados hasta el fondo con la principal potencia del mundo que se va a cobrar todo saqueando los recursos naturales y contaminando el agua, la tierra, el mar. Con un gobierno que cambia la legislación para poder explotar a los trabajadores y perseguir a los que piensan distinto, incluso los periodistas y los artistas. Con la justicia que persigue incansablemente a cualquier progresista que intenta oponerse al fascismo imperante. Van a ir presos todos los que se atrevan o atrevieron a pensar en el pueblo, en cambio a los aliados del poder, sean tanto o más corruptos, nadie los toca. Así se aseguran de meterle miedo a toda la clase política para que a nadie más en los años venideros se le ocurra hacerse el "zurdito".
Con Cristina Kirchner embarcada en hundir al peronismo detrás de ella, con tal de que nadie le quite el lugar. En ese sentido está aliada con Milei en contra de Kicillof, que se atrevió a desafiarlos a ambos y perdió en las urnas.
Axel Kicillof es fachero, buen tipo, nunca robó, sabe de verdad de economía, es brillante pero no es payasesco ni corrupto. Entonces no tiene posibilidades de ser Presidente.
El modelo que la gente viene eligiendo en la urnas es cuanto peor es el candidato o la candidata más los votan.
Locura, corrupción, performance constante, eso es lo que parece valorar ahora este bendito país ya pasado de todo y entregado a su propia destrucción.
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