Durante todo el 99 tuve una intensa actividad nocturna. Me acuerdo que hasta saqué un crédito en uno de esos lugares truchos que abundan, donde solo con un recibo de sueldo te dan plata a intereses importantes. Saqué 800 pesos, de los cuales habré devuelto 200 y después me colgué. Pero todo fue en aras de vivir una vida vanguardista. Recuerdo también, que trabajaba hasta la noche en el centro y de ahí caminaba contento hasta La Cigale, en el Bajo, sino todos los días, casi todos. Y de jueves a domingo esto se complementaba con ir luego a un recién inagurado Club 69, que funcionaba en ese momento en el Teatro Concert.
En medio de esa movida había montones de gente del ambiente, pero siempre me llamó la atención un grupo de dos o tres que siempre estaban, como yo, infaltables.
Un día, estando en el Club con una chica, me llamó la atención el curioso efecto fosforescente que causaban las luces y el strobo sobre los vasos de plástico ( que todos empuñabamos alegremente ), lo cual hacía parecer que los vasos flotaran. - Mirá, parece que los vasos llevaran a las personas- le dije a mi amiga.
Un año después, mirando un video de Catupecu Machu descubrí a los compañeros dandys, reyes de la noche, que cantaban algo así como: ahi pasa un trago/ con un amigo...
No soy tan megalómano como para pensar que me robaron la frase o me estaban citando, mas bien pensé en las simetrías de gente que uno tal vez no trató nunca, pero que vivió cosas similares en momentos similares y por eso se producen estos cruces mágicos.
Y estoy esperando que se recupere Gabriel para poder ir a ver nuevamente la potencia, la furia, de estos curiosos hermanos de sangre.
Recurso
-
Hace mucho tiempo yo tenía un recurso
para escapar de la tristeza
imaginaba una sábana blanca colgada al sol
yo era esa sábana que recibía
el calor y l...
Hace 4 semanas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario