Asi como Verbitsky acertó cuando dijo que el gobierno de Kirchner es más de gestos que de gestión, una parte importante de la gente progre abusa de los gestos y la falta la ruptura hacia nuevos rumbos.
Hablo de gente que en otras épocas, en mayor o menor medida, por pensar diferente fue perseguida y discriminada y hoy, una vez que están instalados en el discurso oficial, parecen haber perdido todo poder de transgresión a manos de una corrección política demasiado careta.
¿Hacia donde ir? ¿Que hacer? serían las preguntas y si bien hay mucho hambre e injusticia social, solo escucho lugares comunes y de repente sin que nadie lo anuncie, un cholulismo berreta, un chusmerio de vecina de barrio.
Cambian las citas, pero el contenido es el mismo: vos tendrás una 4x4 pero yo leí las obras completas de Sábato y Cortázar, por lo tanto soy mejor que vos (!).
Asi es como se hace exactamente lo contrario de lo que aparece en el discurso, es una discriminación al revés y no un acto de verdadera libertad y superación.
-Somos amigos de este escritor, de aquel artista plástico, vivimos en el exilio con aquel crítico- pero de mérito propio ni hablar. Y cuando menos se espera aparece la barrabasada, el facho escondido contra los bolivianos, los chilenos o quien sea que venga "a usurparnos el trabajo y afearnos el barrio".
Interpreto el progresismo, la ruptura, la actitud rock, como ir por más, aunque te acusen de facho, converso o lo que fuera.
Siempre que alguien piensa y actua en consecuencia se arma quilombo, si no hay quilombo no hay arte, ni filosofía ni nada que valga la pena.
Casa
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La casa de la infancia
viene con el olor de los jazmines
la sombra de la parra en el patio
y el silencio caliente de las tardes de verano
La casa de l...
Hace 14 horas.
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