Mañana me llegan los 45 y voy a festejar a lo grande.
Hermoso número el 45, un número ideal para triunfar y cumplir sueños.
Los 40 no los festejé, así que estos 45 valen el doble.
Aparte siempre se me junta con el Día del Amigo, así que van a ser varios días de festejos.
Tengo mucho para dar, mucho para agradecer y estoy feliz de compartir con gente que me bancó en las buenas y en las malas.
Ya no está Papá, ya no está Pupi, ni los Abuelos; pero festejar también es recordarlos y agradecerles por tanto.
Hay que festejar porque uno nunca sabe cuando se termina este juego.
Hay que bailar y desaparecer en el baile.
Hay que vaciarse de tanta pelotudez innecesaria.
Más allá de toda pena siento que la vida es buena.
Casa
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La casa de la infancia
viene con el olor de los jazmines
la sombra de la parra en el patio
y el silencio caliente de las tardes de verano
La casa de l...
Hace 1 día.
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