UNA CUMBRE

Hace un tiempo hablé de "El corazón de las tinieblas", en relación a la adaptación que le hizo Coppola: "Apocalypse Now". Mi amigo Gaspar me regaló un ejemplar del libro para mi cumpleaños y lo estoy releyendo, por tercera o cuarta vez en mi vida.
Recordemos que Borges (siempre Borges, aunque no lo quiera siempre está) dijo que esta nouvelle era acaso el relato más intenso de todos los tiempos. Coincido, al menos de lo que yo he leído, que es mucho menos de lo que leyó Jorge Luis.
En el principio de la novelita Joseph Conrad describe a su protagonista y sus costumbres de una manera magistral y de paso, hace una especie de teoría literaria, de guia de como se debe leer el libro(¿y vivir la vida tal vez?).
Lo transcribo porque vale la pena: "Era un marino, pero también un vagabundo,mientras que todos los marinos llevan,por así decirlo,una vida sedentaria.(...)Por lo demás, después de sus horas de trabajo, un paseo ocasional o una borrachera de vez en cuando en tierra firme, bastan para revelarles los secretos de todo un continente, y por lo general decide que ninguno de esos secretos vale la pena de ser conocido. Por eso mismo los relatos de los marinos tienen una franca sencillez: todo su significado puede encerrarse en una cáscara de nuez. Pero Marlow no era un típico hombre de mar(si dejamos a un lado su afición a relatar historias), y para él la importancia de un relato no estaba dentro de la nuez sino afuera,envolviendo la historia de la misma forma que el resplandor circunda la luz,igual a uno de esos halos brumosos que suelen hacerse visibles por la iluminación espectral de la claridad de la luna."
Asi,el genio de Conrad anticipa que la esencia de su libro no pasa tanto por la linealidad de la historia, sino por la oscuridad (aunque suene contradictorio) que se desliza en sus márgenes.
Libros como éste te hacen ver cuanto te falta para ser verdaderamente bueno.