Babasónicos y los Auténticos Decadentes habían revolucionado la música de los años noventas con su rescate de las músicas berretas, bizarras. Se hablaba mucho en esa época de kitsch, camp, etc...
Los Decadentes, desde la masividad absoluta y los Baba desde una sofisticación más de culto reivindicaban géneros antes considerados "comerciales".
En 1999 aparece "Miami" y esa búsqueda alcanza un clímax artístico: es una obra maestra hecha con basura. Ya en 2003 todo esto explota comercialmente con "Infame".
En ese sentido, "Anoche" de 2005 es una profundización de lo que fue el ingreso a la masividad con "Jessico" (2001).
Acá llegó la hora de "pelar", se acabó el chiste del pop, esto es rock tirando a hard rock (una referencia importante es Black Sabbath), con algunos matices electrónicos. Acá Babasónicos encontró su forma definitiva, la que perdura hasta hoy.
El disco entero es una epifanía de poesía urbana y música, canciones que parecen zapadas, que caen una detrás de la otra como una cascada potente y al hígado.
Hay hits, claro, siempre hay hits, pero son además temazos: "Carismático", "Yegua", "Puesto".
En "Pobre duende" Dárgelos canta: Miren lo que han hecho con el duende del rock/lo han destrozado/lo han convertido en una estampa estúpida de sumisión.
Hacía un año había pasado el horror de Cromañon y estaba todo dicho.